Cómo lo viejo termina siendo absolutamente innovador
Erginoğlu & Çalışlar emprendió un extenso proyecto de restauración y revitalización para permitir que el grupo de la agencia de publicidad Medina Turgul DDB se mudara a un depósito de sal que había alquilado, un edificio de 170 años de antigüedad que había sido propiedad de TEKEL (Monopolio Turco Estatal de Licores y Tabacos).
El desafío de la restauración fue maximizar la funcionalidad y conservar el carácter original de la estructura. Debían acomodar 5 áreas con diferentes especialidades y permitir que cada unidad existiera en su propio espacio, al mismo tiempo, que pudieran conectarse fácilmente con colegas en unidades hermanas. La solución fue construir una serie de pisos de entresuelo conectados que integraron los diferentes espacios y aumentaron en gran medida el espacio.
Esto se hizo sin desorden ni de ninguna manera dañando estructuralmente la naturaleza poderosa del espacio existente, con sus gruesos muros de piedra y galerías de 10 metros de altura. Los diferentes departamentos y áreas de trabajo de las unidades de la empresa fueron diseñados alrededor de estas galerías. Se creó una estructura secundaria de vidrio y acero sin tocar las paredes de piedra originales y respetando la sensación de vacío del espacio original.
Toda la instalación electromecánica fue diseñada para atravesar las vigas del techo consolidado. Para proteger la textura original del edificio, todos los puntos de referencia de las paredes de piedra se lavaron y consolidaron con soluciones hechas a medida que se formularon después de los análisis químicos iniciales. Las partes arruinadas y dañadas de las paredes fueron cuidadosamente restauradas.
El resultado es un edificio que se adapta bien a los negocios creativos modernos, con varios tipos de espacios para reuniones, desde informales a formales, conectividad entre unidades fácil y la sensación de “espacio de pensamiento” individual por todas partes.
