Una casa creada para la felicidad
Sentirse especial y sentido de familia, y sobre todo no olvidarse de 2 inquilinos que forman parte de ella. Para comenzar debíamos tener en cuenta donde pasarían tiempo Cotton y Jazz, una estancia sobre otra creada para sus siestas y que se accede a través de una escalera. Además contarían con una zona apartada y exterior para sus que hacerse y comida.
La casa feliz, urbana, con elementos reciclados, mesa creada a partir de vigas de derribo, mirador de 100 años, paredes recatadas, todo conforma un conjunto de texturas y crea un espacio inusual. Un proyecto de iluminación con toques cálidos en diferentes zonas de la vivienda, da a la vivienda un carácter de hogar.
La cocina donde rescatamos su alicatado y posterior pintado, para darle una integración con el resto de la casa. Todo bajo una misma gama cromática generamos un espacio especial, donde sentirse cómodo, elegante, y donde el suelo une el espacio de manera completa.